Verano ¡Tiempo libre!

Por una parte, qué delicia dejar de lado la rutina de levantarse a determinada hora para evitar el caos que suele ocurrir cuando nos levantamos tarde, dejar la constante preocupación de qué prepararles a los niños para que lleven de lonche a la escuela, dejar de apurarlos para que hagan sus tareas, para que se laven los dientes y hagan su cama rápido para que no se les vaya el autobús escolar.

Pero por otra parte, ¿qué haremos con nuestros hijos todo este tiempo que no irán a la escuela? Todos sabemos que antes de lo esperado, empezarán las quejas constantes: “estoy aburrido”, “¿qué puedo hacer?” 

¿Y qué podemos hacer para que este periodo de vacaciones resulte una experiencia enriquecedora y disfrutable tanto para nuestros hijos como para nosotros, sin tener que gastar una fortuna?

No hay una respuesta única a esta pregunta, ya que la situación de cada familia es diferente. Hay familias de todos tipos, tamaños y estructuras. Para simplificar la amplia variedad de tipos de familias que nos podemos encontrar, propongo dos siguientes categorías:

a.       Familias en las que no hay un adulto que pueda hacerse cargo de los niños durante los meses de vacaciones. Ya sea porque el o los padres  trabajan, o porque los abuelos u otros familiares viven lejos, o no tienen la salud, la energía o la disponibilidad para tomar esta responsabilidad; o porque no se conoce a alguien de confianza o es muy caro pagar a un tercero de tiempo completo para que cuide de los niños.

b.      Familias en las que hay un adulto que puede cuidar de los niños durante los meses de vacaciones. Ya sea que porque uno de los padres trabaje en el hogar o desde el hogar, porque algún familiar este dispuesto a tomar esta responsabilidad, o porque hay un tercero de confianza a quien se le paga por esto.

Para las familias de la primera categoría descrita, la opción tradicional es encontrar tantas clases o campamentos de verano posibles para llenar el tiempo en que los niños estén de vacaciones. O bien, inscribirlos en una guardería durante los meses del verano. Estas opciones aunque son prácticas,  no son baratas, y tampoco liberan a los niños de la rutina del horario y la estructura. 

Por lo tanto, es recomendable buscar opciones que permitan que haya un adulto en casa a cargo de ellos mientras los padres trabajan. Una opción es “construir una comunidad” de dos a cuatro familias del vecindario o de la escuela o del trabajo, que acuerden en tomar turnos para hacerse responsables de los niños de esta comunidad. Por ejemplo, la mamá de la familia 1 toma vacaciones la primera semana del verano para cuidar a los niños, después el papá de la familia 2 para la siguiente semana, etc.

Otra opción es contratar a un tercero entre varias familias para que sea responsable de los niños por la fracción del precio. Puede ser un adolescente del vecindario, un familiar de alguien de los involucrados, una vecina cuya familia cae en la segunda categoría descrita arriba. La primer semana será en la casa de la familia 1, después en la de la familia 2, etc.

O bien, tener cualquier combinación de las opciones anteriores. O llegar a algún arreglo con la empresa en la que se trabaja.

Si esto resulta factible, la familia pasaría a estar en la siguiente categoría, donde hay un adulto que cuida de los niños en casa.

Para las familias que caen en esta segunda categoría descrita las opciones son infinitas, y lo recomendable es hacer una lista de todas las actividades posibles antes de que llegue el verano. 

Se puede invitar a los niños a dar ideas para esta lista de actividades, o pedir a otros niños o familias sus ideas. El internet también es una fuente de buenas ideas. 

La lista de la diversión

Tal vez sería un reto familiar emocionante llegar a tener una lista de 100 actividades para el verano.

Cuando el periodo de vacaciones inicie, se puede colocar esta lista en el refrigerador para ir realizando las actividades escritas día a día, hasta que se termine con la lista. El orden no importa.

O bien, se pueden escribir en papeletas individuales y ponerlas dentro de una caja, para que cada día se saque una papeleta al azar y se tenga una actividad “sorpresa”. Se pueden tomar turnos para sacar la papeleta.

Con el fin de ayudarles a iniciar esta lista de actividades, aquí les presento algunas ideas que requieren del mínimo dinero posible y ayudan a desarrollar la creatividad y el intelecto de los niños.

Actividades

1. Construir algo usando materiales de la caja del reciclaje.

2. Componer una canción: incluyendo la letra y la música. La música puede hacerse con instrumentos construidos con material de la caja del reciclaje.

3. Hacer un poema de uno mismo con las letras de nuestro nombre como inicio de cada párrafo. Ejemplo: Alguien con nombre de Ana 

Amaneceres hermosos,
Navegando en el mar,
Aves que ves volar…

O hacerles un poema a los abuelos con sus nombres.

4. Hacer un libro, que incluya la historia, el índice, la dedicatoria y las ilustraciones. ¡¡Esto puede tomar varios días!!

5. Hacer una obra de teatro donde participen todos. Esto incluye: escribir diálogos, diseñar vestuarios (usar lo que se tiene en el closet de manera creativa), peinados, maquillaje ¡y actuar!

6.  Hacer un “Scavanger hunt” (búsqueda del tesoro) en la biblioteca local. Encontrar 10 hechos sobre un personaje histórico, o sobre un país lejano, o sobre cómo hacer algo, por ejemplo.

7. Aprender a hornear galletas.

8. Aprender a tejer, a bordar o a coser.

9. Aprender a decir “hola” en 10 idiomas diferentes. La biblioteca y el internet son buena fuente para esto.

10. Formar un club de lectura una vez a la semana.

11.  Escribir una carta al senado proponiendo una solución a un problema actual.

12. Poner un puesto para vender limonada.

13. Encontrar 10 usos diferentes de algo. Ejemplo: un clip, una hoja de papel, un borrador, etc

14. Leer chistes y actuarlos.

Espero que esta lista sirva de inspiración y guía para que inicien su propia lista. ¡Que disfruten del tiempo con su familia y tengan un excelente verano!

Campamentos Locales

Dutchess Community College — Programa de golf de dos semanas para niños de 7 a 16 años y campamento de baloncesto de una semana para niños y niñas de 6 de 12 años. Para más información visite http://www.sunydutchess.edu/cfweb o llame al (845) 431-8910.

Camp-Fit en Fishkill – Este campamento tiene programas en artes y oficios, baloncesto, deportes de cancha, racquetball, fútbol, lecciones de natación, tenis y voleibol.  Para más información, http://www.allsportfishkill.com/camp_fit.html o tel. (845) 896-5678, ext. 175.

Bard College en Annandale – Las actividades incluyen fútbol, baloncesto, tenis, correr a campo traviesa y voleibol, también el campamento de Junior Raptors y un campamento de recreación general para las edades de 5 a 10. Los programas empiezan el 30 de Junio. Registrese en www.bard.edu/athletics/camps o llame al (845) 758-7531.

YMCA de Poughkeepsie – El campamento tiene artes y oficios, deportes y partidos para niños de 4 a 14 años. Para más información, www.dutchesscountyymca.org/fallcamp.html, (845) 471-9622.

YMCA de Kingston – Los programas empiezan el 30 de junio y terminan el 29 de agosto. Excursiones, natación, partidos, deportes, teatro, artes, oficios y baile. Para más información, www.ymcaulster.org/camps-campwiltmeet.html, (845) 255-2107

El Campamento de Center of the Square – de la iglesia Episcopal de Cristo en Poughkeepsie. El campamento empieza el 7 de julio y termina el 15 de agosto, de 8:30 de la mañana a 4 de la tarde. Llame al (845) 471-3068.

También muchas bibliotecas tienen actividades durante el verano como la Biblioteca de la Asociación de Hudson en 400 State Street, Hudson, New York 12534. Llame al (518) 828-1792 o visite http://hudson.lib.ny.us/ para más información.

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