Un beso

Clavel sonoro de punzó fragoso

que germina en nuestro pecho

fuerza de imán y de hermosura

labios entreabiertos,

mostrando su hermosura.

Saludo sellado para el amigo

indicando el fulgor del sentimiento

que brota con lo más dichoso

desde lo profundo de la morada

que llevamos dentro.

Es como perla preciosa

que surge de una alforja,

arrebatada luz apartada de las sombras,

aire tibio acariciante, para la mejilla que espera,

que no conoce otro saludo, más que de esta manera.

Como alondra enloquecida vuela, se acurruca

transmitiéndonos toda su fuerza, todo su aliento

cual manantial de dulzura

sueña como temblor de cielo abierto.

Te sigues preguntado el ¿por...qué de un beso?

Sencillamente es el máximo de la expresión

de todo nuestro sentir de corazón.

Saludarnos sin un beso, es no definir

todo lo que queremos desear

¡lo que decimos sentir!