Cultura y noticias hispanas del Valle del Hudson
Opinión
La historia, parte tres
Por Carlos González
May 2020 Este 21 de junio 2020, es el centenario del Bruderhof. Si tienes alguna pregunta o comentario, sobre el centenario, escribe a: .bruderhof.com/es/contáctanos
Jesús resucitado es el Mesías que revela para el mundo la existencia del Espíritu de vida. Su propósito, nacer en el corazón humano, para darle plenitud a su vida y un porvenir celestial.
Obedeciendo las instrucciones del resucitado (Hch1:4), discípulos y otras personas, hombres y mujeres que conocían a Jesús, formaron una comunidad en Jerusalén (Hch1:15).
En contraste con la brutalidad y desigualdad de la cultura romana del primer siglo, los primeros cristianos eran generosos. La nueva comunidad testificaba con palabras y acciones todo lo que habían visto y oído, —imitaban a Jesus renunciando a intereses propios— para ayudar a los más necesitados.
Todos los creyentes se reunían en un mismo lugar y compartían todo lo que tenían. Vendían sus propiedades y posesiones y compartían el dinero con aquellos en necesidad… (Hch2:44-45).
Todos los creyentes estaban unidos de corazón y en espíritu. Consideraban que sus posesiones no eran propias, así que compartían todo lo que tenían (Hch4:32).
Se dice fácil, pero ser cristiano demanda sacrificio y transformación personal. Además, en los primeros siglos era motivo de hostigamiento, persecución y hasta la muerte. Pensemos que en los primeros siglos no había Biblias, ni iglesias. El Evangelio era el vivo testimonio de los creyentes que, por su fe expresada en el amor y servicio uno al otro y a los demás, el Espíritu de vida armonizaban entre ellos.
La Biblia es una compilación de textos, escritos en varios idiomas durante varios siglos, y gracias a que los Apóstoles fueron dejando su testimonio por escrito, el Nuevo Testamento fue confirmado y ratificado a fines del siglo IV. Es el libro con mayor impacto en la historia de la civilización moderna, de todo el mundo, en casi todas las disciplinas: ética, leyes, educación, medicina, bellas artes, etc.
Vayan, pues, a las gentes de todas las naciones […] yo estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo (Mt28:19-20 DHH). En la expansión del cristianismo, cada nueva comunidad brindaba un servicio público y gratuito cuidando al enfermo y desamparado, con la misma dignidad que a cualquier otro mimbro. Este fue el comienzo del sistema de salud y otros servicios sociales.
Desde que Jesús se levantó de entre los muertos, el cristianismo ha sido el principal defensor de los derechos humanos y dignidad de los más pobres, como ninguna otra institución.
El cristianismo es el precursor del sistema universitario con sus escuelas monásticas del siglo VI, y el principal defensor de la educación para los más pobres y de las mujeres, algo que se puede ver con Escolástica, la hermana gemela de san Benito, siglo V-VI.
En el plan universal del Espíritu de vida, el cristianismo del siglo XI se convirtió en: catolicismo romano y ortodoxia oriental. En el siglo XVI surgieron: luteranismo, calvinismo, anabaptismo y anglicismo. En los siglos XVIII y XIX, muchos movimientos de independencia e ideologías sociales, fueron inspirados por la paz y justicia de los Evangelios.
En el siglo XX, marcado por violencia extrema, la diversificación del cristianismo ha sido la más grande de la historia, nuevas denominaciones, grupos, etc., tienen su origen en los Evangelios.
En los muchos siglos de expansión y diversificación del cristianismo, ha habido muchos aciertos y errores. Sin embargo, Jesús dice: …Ustedes los pueden reconocer por sus acciones… (Mt7:15-20 DHH). COPYRIGHT 2020
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Obedeciendo las instrucciones del resucitado (Hch1:4), discípulos y otras personas, hombres y mujeres que conocían a Jesús, formaron una comunidad en Jerusalén (Hch1:15).
En contraste con la brutalidad y desigualdad de la cultura romana del primer siglo, los primeros cristianos eran generosos. La nueva comunidad testificaba con palabras y acciones todo lo que habían visto y oído, —imitaban a Jesus renunciando a intereses propios— para ayudar a los más necesitados.
Todos los creyentes se reunían en un mismo lugar y compartían todo lo que tenían. Vendían sus propiedades y posesiones y compartían el dinero con aquellos en necesidad… (Hch2:44-45).
Todos los creyentes estaban unidos de corazón y en espíritu. Consideraban que sus posesiones no eran propias, así que compartían todo lo que tenían (Hch4:32).
Se dice fácil, pero ser cristiano demanda sacrificio y transformación personal. Además, en los primeros siglos era motivo de hostigamiento, persecución y hasta la muerte. Pensemos que en los primeros siglos no había Biblias, ni iglesias. El Evangelio era el vivo testimonio de los creyentes que, por su fe expresada en el amor y servicio uno al otro y a los demás, el Espíritu de vida armonizaban entre ellos.
La Biblia es una compilación de textos, escritos en varios idiomas durante varios siglos, y gracias a que los Apóstoles fueron dejando su testimonio por escrito, el Nuevo Testamento fue confirmado y ratificado a fines del siglo IV. Es el libro con mayor impacto en la historia de la civilización moderna, de todo el mundo, en casi todas las disciplinas: ética, leyes, educación, medicina, bellas artes, etc.
Vayan, pues, a las gentes de todas las naciones […] yo estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo (Mt28:19-20 DHH). En la expansión del cristianismo, cada nueva comunidad brindaba un servicio público y gratuito cuidando al enfermo y desamparado, con la misma dignidad que a cualquier otro mimbro. Este fue el comienzo del sistema de salud y otros servicios sociales.
Desde que Jesús se levantó de entre los muertos, el cristianismo ha sido el principal defensor de los derechos humanos y dignidad de los más pobres, como ninguna otra institución.
El cristianismo es el precursor del sistema universitario con sus escuelas monásticas del siglo VI, y el principal defensor de la educación para los más pobres y de las mujeres, algo que se puede ver con Escolástica, la hermana gemela de san Benito, siglo V-VI.
En el plan universal del Espíritu de vida, el cristianismo del siglo XI se convirtió en: catolicismo romano y ortodoxia oriental. En el siglo XVI surgieron: luteranismo, calvinismo, anabaptismo y anglicismo. En los siglos XVIII y XIX, muchos movimientos de independencia e ideologías sociales, fueron inspirados por la paz y justicia de los Evangelios.
En el siglo XX, marcado por violencia extrema, la diversificación del cristianismo ha sido la más grande de la historia, nuevas denominaciones, grupos, etc., tienen su origen en los Evangelios.
En los muchos siglos de expansión y diversificación del cristianismo, ha habido muchos aciertos y errores. Sin embargo, Jesús dice: …Ustedes los pueden reconocer por sus acciones… (Mt7:15-20 DHH). COPYRIGHT 2020
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