Poemas para San Valentín

Si ese azul en el cielo de pronto, de la nada,
se volviera del negro más oscuro
no tendría ningún miedo, te lo juro
pues yo sólo me guío con la luz de tu mirada.

Si los mares con sus aguas se pusieran tan espesos
que la tierra se tornara en gran desierto
tomaría la ocasión para decirte que, por cierto,
mi sed sólo se calma con tus besos.

Si la tierra y el cielo se pusieran de cabeza
y la gente sucumbiera en gran locura,
el caos no tendría efecto en mí pues mi cordura
se mantiene con la paz y perfección de tu belleza.

Y si el mundo por entero tuviera fin hoy día,
yo, tomado de tu mano, miraría aquel instante
cual extraño que observa otro planeta muy distante
pues mi mundo ya no es éste sino tú, querida mía.

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